La lucha por los derechos de las personas de la diversidad sexual tiene muchos frentes. Edgar Dante Treviño Montes decidió, desde hace 25 años, que el suyo sería el de las artes escénicas.
Su campo de batalla viaja con él y ahora está en Puerto Vallarta.
Al originario de Matamoros, Tamaulipas, lo ha conducido la actuación, trabajo que lo llevó a Cuba, El Salvador, Argentina, Chile, Colombia y toda la República Mexicana, para después anclarse en esta ciudad jalisciense de la Región Costa Norte en 1993.
“Es un lugar muy energético, llegué cuando la comunidad gay estaba en efervescencia; ya éramos un destino turístico gay”.
“Pero conforme han pasado los años puedo decir que estoy orgulloso de que hemos sembrado la semilla de lo que hoy es la comunidad gay en esta ciudad“.
“Hemos despertado conciencias, pero también hay doble moral por parte de las autoridades”.
Y es por el hecho de que aún existe homofobia y un contradiscurso, que Edgar Treviño emprende proyectos escénicos que buscan dar visibilidad a los problemas que viven las personas de la comunidad LGBTIQA+ (Lésbico, gay, bisexual, travesti, transgénero, transexual, intersexual, queer, asexual).
Algunas obras que ha escrito, producido y actuado son:
- Soy homosexual, el primer monólogo con el que viajó a Centroamérica y ganó un festival en El Salvador.
- Una cerveza y un amor, que habla sobre los matrimonios gay antes de la legalización de ests uniones.
- Si me permiten bailar, que habla sobre un bailarín que deja a su novio, que se va de gira en un circo, y él se vuelve coreógrafo de musicales.
- La obra de teatro griega de Las memorias de Adriano.
- Por ellas las botellas y por sus hermanas las botanas, que habla sobre las mujeres y su lucha feminista.
Retrata casos de extrema violencia
Otra de las obras, que se sienten en la sangre por su crudeza, es Cómo ser gay y no morir en el intento, misma que se presentó en el XX Encuentro de Teatro del Interior, realizado en Guadalajara en 2017.
“Esta obra es cruda y real, pues habla sobre cinco asesinatos por homofobia reales, mismos que no se han podido resolver“.
“Esta es mi trinchera para decirle a la gente que abra los ojos y decirles que nos están matando”.
Cómo ser gay y no morir en el intento / parte 1 de 4
Para Edgar Treviño la lucha es dura pero sí hay avances y que él seguirá trabajando con el arte o para esparcir la causa.
“Trato de que mis personajes y obras vayan hacia ese destino, los temas de la diversidad”.
“¿Por qué? porque es mi trinchera donde puedo dar a conocer cosas que la gente no quiere ver, pero existen“.
El dominio del cabaret
Él es multifacético, no sólo hace teatro, también hace drag y cabaret, un nicho en el que puede ser más contestario por medio de la comedia, como en la puesta en escena La candidata independiente.
“También presentamos en Lagos de Moreno la obra Los mayates también lloran. Creo que los mayates deben tener su profesión –comenta con risa e ironía–; que tengan su cédula profesional, con Infonavit, Seguro Social, ya que ser mayate es una labor ardua.
“Es muy divertido, muy del mexicano y uno se divierte mucho”, dijo en entrevista para Ciudad Olinka.
Otros proyectos en los que el tamaulipeco ha participado son contar cuentos para el público infantil y su participación en la película Sirena, protagonizada por Morganna Love y dirigida por Miguel Ángel Contreras Pelayo.
La lucha no termina y, para Treviño, aún habrá mucho por hacer para hacer valer los derechos de quienes no viven la heteronorma, pero que aman igual.
Fotografías: Iván Serrano Jauregui / Cortesía