
El ojo del arquitecto, el de Horus, el delta radiante, el ojo que todo lo ve.
Ese místico símbolo que se repite en diversas culturas del mundo es también el emblema que ha plasmado en pintura el artista plástico Sergio Zepeda Castañeda.
Enmarcados en triángulos, estas pinturas ven pasar a quienes admiran la obra que se presenta en la muestra Retroverso.
Que se encuentra en las salas de la planta alta del Museo de las Artes (MUSA) de la UdeG y que está abierta al público hasta el 15 de octubre.
Son alrededor de 80 piezas, entre pinturas, fotografías, acuarelas, dibujos, pero sobre todo de arte objeto.

Mismas que envuelven en un universo surrealista que data de hace seis décadas, donde las cosas adquieren significados potentes, desafiantes e irónicos:
Manos, pies, rostros de santos, monos de juguetes, algunos encajonados, enmarcados, encapsulados.
Torsos conectados a sistemas eléctricos, cachivaches y muebles antiguos transformados en quimeras.
Objetos que cuentan historias inesperadas
A decir del también arquitecto, su arte deviene del apego a los objetos.

“He visto y sentido que al paso de los años los objetos adquieren una personalidad propia, muy independiente de la función para la que fueron concebidos”.
El resultado de su intervención, asegura, es el de un mensaje totalmente inesperado:
“Uno que permite admirar todavía más el valor de cada pieza y leer un conjunto o un escenario inventado por nosotros. Para mí esa es la raíz del arte objeto”.

Retroverso fue inaugurada en presencia de autoridades de la Universidad de Guadalajara, quienes elogiaron el impacto artístico y cultural que a lo largo de 60 años el artista ha dejado en Jalisco.
“La obra es el resultado de un trabajo complejo sin línea preestablecida, sin membresía a corriente o cofradía artística”.
“Es una expresión de libertad que se entrelaza con la docencia, la academia, la orientación y promoción de jóvenes artistas”.
“Mismos que he tenido la fortuna de encontrar, conocer, reconocer e impulsar, muchos como alumnos”.


Una estética mitológica, la de Sergio Zepeda
Sergio Zepeda añadió sentirse honrado de exponer en el MUSA, espacio al que le tiene especial afecto tras décadas de trabajar en la universidad.
La directora del MUSA, Maribel Arteaga Garibay, explicó que en las obras de Sergio Zepeda habitan extraños.
“Son personajes cotidianos de seres procedentes de las más antiguas mitologías; sin embargo, existe un algo que nos permite identificarnos con ellos”.
“Como autor, su mundo es el de las aspiraciones surrealistas, que utilizan algunos fragmentos de una realidad para aquilatarse en la nuestra y tomarse una pausa dentro de su camino hacia la transmutación”.


Retroverso cuenta con la curaduría de Moisés Schiaffino y Diego Espejel Jiménez, y se logró con apoyo del Legado Grodman y la University of Guadalajara Foundation.
En la inauguración, la esposa del autor, Linda, compartió que se siente honrada que su pareja de vida presente su obra en el MUSA, sitio que representa tanto para su familia.
“Y qué honor estar aquí con tu trabajo y tu sentir de pintor”.
“Qué orgullo que en estos salones está la muestra de tu quehacer, pero más valioso ser vecino temporal de uno de los grandes pintores mexicanos, José Clemente Orozco”, recalcó.

Fuente: Universidad de Guadalajara
Información: Iván Serrano Jauregui
Fotografías: Iván Lara González