A principios del siglo XX, durante el Porfiriato, en Guadalajara comenzó la expansión urbana hacia el lado poniente de la ciudad, lo que dio origen a la llamadas colonias, caracterizadas por tener casas de estilo afrancesado.
Así fue como las colonias Americana, Moderna y Reforma llamaron la atención por sus fincas con amplios pórticos, columnas, escaleras, techos de paloma y jardines que rodeaban la vivienda; era la zona donde los tapatíos más ricos habitaron por varias décadas.
Hoy son contadas las construcciones pertenecientes al estilo arquitectónico ecléctico que sobrevivieron a la modernización de la ciudad, por ello y por su importancia patrimonial buscan ser conservadas por distintas instancias y organizaciones.
Aunque estas fincas ya están identificadas, fue por petición del Patronato del Centro Histórico de Guadalajara a académicos del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD) de la Universidad de Guadalajara, que trabajaran en la creación de un documento en el que se establecieran las viviendas eclécticas en esta zona de la ciudad.
Fue así como con la ayuda de docentes y estudiantes de la licenciatura en Urbanística y Medio Ambiente de esta universidad, que nació la Guía de la vivienda porfiriana en Guadalajara. Colonias Francesa, Americana, Reforma y Moderna.
“Nació de un trabajo escolar aprovechado para crear una guía accesible. Es un trabajo documentado a partir de una serie de textos ya conocidos sobre la arquitectura en la ciudad, cuyo formato permite que más gente conozca sobre los desarrollos urbanos característicos de la época porfiriana”, dijo la profesora Olga Clarisa Becerra Mercado.
Esta guía incluye cerca de 100 fincas de las colonias, señalizadas y seccionadas por zonas.
La investigación que duró dos años y que fue resultado de un arduo estudio de planos y archivos históricos pudo ser editado gracias al Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias (Pacmyc) de la Secretaría de Cultura de Jalisco, del que los universitarios fueron beneficiarios.
Peligran las fincas
Ramón Reyes Rodríguez, investigador del CUAAD, afirma que estas fincas están amenazadas, tanto por aquellas autoridades o dueños que desconocen su valor y las destruyen, modifican o descuidan.
“Otros factores que suman al riesgo potencial es la transformación de los usos de suelo, que pudiera influir en transformar las fachadas e interiores para hacerla más funcional al uso que se pretendiera; y otra es la verticalización de la ciudad, que transforma la fisionomía del contexto del paisaje urbano”, compartió Reyes Rodríguez.
Los académicos esperan que este documento contribuya a la generación de conciencia de estas construcciones que reafirman la identidad de la zona, así como la de los tapatíos.
Quien guste adquirir uno de los 2 mil ejemplares que se editaron, puede acudir al piso 8 del del edificio administrativo del CUAAD, donde se encuentra el Departamento de Proyectos Urbanísticos y adquirirlo de manera gratuita.
Fotografías: Adriana González / Universidad de Guadalajara