Por: Enya Roseli, para la columna “Hablemos verde”, de Letra Fría


Entorno

A 30 minutos en camioneta desde El Chante, Jalisco está el cruce entre el Río Ayuquila y el Arroyo Manantlán. 

Este es un sitio donde los pescadores de la localidad de El Chante van a abastecerse para comer el festín del día y llevar un poco más a su familia.

Pero ellos no son los únicos que consumen los peces de la zona, pues la nutria y la diversidad de aves se abastecen a diario. 

Además vimos a la cigueña de madera o del trópico “Mycteria americana”, muy particular en su aspecto, esta ave junto con la garza buscaban comida entre las aguas del arroyo La Yerbabuena cerca de El Chante.

También se vio el ave rapaz de caracara y Buteo jamaicensis, Piaya cayana, Calocitta colliei, Ptiliogonys cinereus, Nannopterum brasilianum.

En un recorrido por estos caudales se identificaron las siguientes especies de aves: 2 especies de martines pescadores, uno pescando Chloroceryle americana y otro con su sonido nos alertó de su presencia Megaceryle torquata

El Río Ayuquila tiene grandes árboles en su ribera, pero muchos han sido talados y sitios desmontados para el ganado.

Esto pone en descubierto el suelo cercano a los ríos (sumándole los desmontes por agave de zonas cercanas y sus propios procesos naturales de sedimentación) y hace que su agua se turbie más, distinguiendo los colores entre el caudal del Ayuquila y del Manantlán.

El Arroyo Manantlán trae sus aguas desde las montañas protegidas de Manantlán, su agua cristalina deja al descubierto el lecho del río y las diversas formas de rocas.

Además, al voltear a ver la zona de las pozas del arroyo se ven nadando peces con dos franjas negras en el cuerpo.

El agua es muy helada, pero el nadar ahí te bombea la sangre por todo el cuerpo y te conectas con lo puro del lugar.

Es importante conservar los ríos y arroyos, no solo por su agua también por la biodiversidad y familias que se sostienen de ellos.

La restauración y vigilancia también son acciones importantes a potenciar en este y todos los ríos y arroyos (más info: red social vigilando ríos y arroyos) manteniendo así una relación dinámica y sustentable entre sociedad y humanos.

Aquí les comparto más fotografías de este recorrido:

Más fotografías de naturaleza de aves, paisajes e historias humano-naturaleza en @enya_roseli.

FuenteLetra Fría
Artículo anteriorKarla Castañeda, tapatía de manos teulenses en “Pinocho”
Artículo siguienteSan Sebastián, el patrono de la fiesta eterna en Tuxpan
Ciudad Olinka
Medio informativo enfocado en difundir el legado cultural y artístico de las regiones de Jalisco.