Carla Bernal, llamada “Carly” o “Conejo” por sus cercanos, es la creadora del proyecto fotográfico Conejo con Alas.

Se caracteriza por tener a la fantasía como temática principal: abundan hadas, brujas, princesas, demonios y todo personaje sobrenatural que nace en su mente.

La única regla que sigue es soltar la imaginación.

Ella es originaria de Ciudad Guzmán, pero radica en en Puerto Vallarta, Jalisco.

En entrevista para Ciudad Olinka comenta que comenzó a relacionarse con la fotografía como pasatiempo, al terminar la preparatoria en 2013.

Al ver que era algo con lo que poco a poco se apasionaba, decidió estudiar Artes Visuales para la Expresión Fotográfica en el Centro Universitario de la Costa (CUCosta), de la Universidad de Guadalajara.

Al inicio disfrutaba retratar paisajes y trabajar en la ilustración de personajes, enfocada principalmente en mujeres. A partir de eso decidió trabajar con el retrato.

“Logro desconectarme junto con las modelos de la realidad, trato de que el escenario que esté por capturar sea único, salir de lo cotidiano por unos minutos, es demasiado terapéutico para mí”.

Lo que más disfruta es crear brujas. Antes de la captura hay una investigación previa para pensar en los detalles y elementos que deberá llevar el personaje.

Ella misma realiza las coronas, ramos, escobas y hasta las vestimentas.

Su espíritu fotográfico la llevó a involucrarse con los retratos surrealistas y con aquellos que conllevan siempre la entelequia, es por ello que los retratos simples y sencillos son los que menos disfruta.

“Siento que no soy yo con mi trabajo”.

Conejo con alas

Una de las curiosidades de este trabajo es el nombre que recibe, inspirado en la antigua coneja de Carla Bernal.

Pensó en los conejos, que al percibir que no hay nadie a su alrededor salen de su madriguera, y cómo si alguien los ve o se acerca, de inmediato se esconden por miedo.

Lo mismo pasa con las personas, compartió.

“Cuando estamos solos podemos ser nosotros mismos, nos sentimos libres y seguros, nadie nos ve y juzga; pero cuando estamos rodeados de personas sentimos miedo, desconfianza o no podemos ser nosotros mismos”.

Al añadirle alas al conejo quiso reflejar la libertad que tiene como fotógrafa para expresarse sin ningún miedo.

“Mi trabajo es un espacio donde cualquier persona puede ser como siempre ha querido, su espacio de libertad sin etiquetas”.

Autorretrato enigmático

Pero no termina aquí la intriga que la artista de Conejo con Alas quiere plasmar, ya que sus fotografías son publicadas bajo el anonimato, con el objetivo de que las personas puedan conocer su trabajo pero no a ella.

No obstante, menciona que se autorretrata en sus propias modelos, dejando en el personaje su esencia y a su vez el enigma que permite a las personas soltar su imaginación.

En sus fuentes de inspiración están presentes las artes plásticas de pintores como Monet, Salvador Dalí y Remedios Varo, quien también buscaba retratar el surrealismo.

Para comenzar a ejecutar un proyecto, Carla visualiza si el escenario estará envuelto por el mar, por el bosque, su reto inicial es la combinación entre el ambiente y el personaje en cuanto a colores.

“Lo dibujo, lo imagino y guardo en mi memoria hasta el día de la sesión”.

Carla describe que su principal logro es inspirar a otras personas.

Una de sus mayores satisfacciones son los mensajes que recibe para externarle la influencia que tienen sus fotografías para aprender a amar sus cuerpos como son.

“Poder influir así para mí es mucho más valioso que haber sido nombrada en alguna revista o invitada a alguna exposición. Mi meta siempre ha sido esa, poder inspirar a alguien más así como otros me inspiraron a mi”.

Extiende tus alas, nunca dejes de volar. Es el lema que define su trabajo, mismo que quiere dejar en cada retrato y comunicar que hay que extender las alas y no aterrizar.

La fotografía le ha permitido explorar sus lugares internos creativos, aprender a quererse y conocerse, así como a convertirse en la chica extrovertida y libre que antes no habitaba en ella.


Fotografías: Cortesía Carla Bernal.

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Crista Myzrahym Arredondo
Reportera de Ciudad Olinka. Estudió Periodismo en CUCiénega de la UdeG.