Zacoalco de Torres es el municipio de la región Sur / Lagunas donde se ha heredado la tradición de la creación de equipales.
El diseñador industrial Javier Reynaga Fletes decidió innovar en su creación con “Milo”, un equipal que entre sus atributos está el respeto hacia el medio ambiente.
Pues no sólo se utiliza madera certificada por una empresa alemana, tampoco se interviene con procesos químicos en su fabricación y está pintado con anilina.
Esto lo hace un proceso más natural, y su producción y fue realizada con un pago justo.
Por cumplir con los criterios como innovación y sostenibilidad, el joven de 26 años, obtuvo el primer lugar en la categoría Profesional en la 15ª edición del Concurso Nacional de Diseño de Muebles (Dimueble).
“Considero que el equipal no es una artesanía, es decir, por el tiempo y los cambios históricos, y culturales”.
“Hay fotos de finales de 1800, en donde se ve emplear a estas piezas como asientos. Es un mueble ritual más que artesanal”, dijo.
De hecho, la palabra equipal significa “asiento de los dioses” y proviene de la palabra náhuatl icpalli.
Encontró alternativas para la fabricación del equipal
El también egresado de Diseño Industrial, del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD) de la UdeG, lamentó que los materiales originales de este mueble, como el palo de rosa o el taziste, están mal explotados.
Por ello buscó otros insumos y decidió emplear el haya (árbol), baqueta de vaca y cuerda de maguey.
Su realización le llevó alrededor de un año, que incluyó trabajo de investigación previo.
Aprovechó los valores culturales y tradicionales y le sumó valor estético al diseño y fabricación.
Por ejemplo, el color de la baqueta es similar al milo (sorgo), cosecha común en la zona.
Además, es desarmable para su fácil traslado y exportación. Incluso, al dañarse una pieza, es posible sustituirla sin afectar al resto.
Reynaga Fletes apuntó que este trabajo es un homenaje a la tradición y riqueza mexicana, puesto que es de los pocos muebles que pueden considerarse nacionales.
Además, es un reconocimiento a su legado familiar, ya que uno de sus tíos elabora equipales y fue quien le inculcó su gusto por el mobiliario.
Reconoció que la competencia estuvo reñida, pero manifestó su alegría por el logro.
Añadió que su prototipo ya lo compraron. Ha tenido buena aceptación y la meta es producirlo.
Fuente: Universidad de Guadalajara
Información: Eduardo Carrillo / CUAAD
Fotografías: Cortesía