CinemaEntre los cortometrajes de animación seleccionados para competir por el premio Rigo Mora durante el Festival Internacional de Cine en Guadalajara en su edición 37, destacó El año del radio (2022), dirigido por el tapatío Samuel Kishi.

El corto se desarrolla en la Guadalajara de los 90 y narra la historia de Alex, un niño de 7 años que vive en compañía de sus dos hermanos pequeños y de su tía Lola.

Ella es la encargada de cuidarlos mientras su madre trabaja como locutora en una estación de radio.

Luego de presentar el cortometraje en la Cineteca FICG, el realizador participó en una sesión de Q & A, donde dio más detalles del proceso detrás de su obra.

El año del radio, junto a Somos Mari Pepa (2013) y Los Lobos (2019) conforman lo que el director denomina como “la trilogía de la memoria”.

Talento. El director tapatío Samuel Kishi Leopo ha demostrado su talento en ediciones pasadas de este festival, con otras joyas del cine como “Los Lobos”. Fotografía: Secretaría de Cultura Jalisco

Homenaje a la memoria

Narrado en voz en off por el propio Kishi, el corto muestra los pequeños detalles y recuerdos del hogar donde creció, con las estaciones de radio como sonido de fondo.

Sobre la trama, hay una momento en la que la madre del protagonista le pide a los radioescuchas de aquella época que describan lo que ven en la noche.

“Mis carnales y yo desde pequeños empezamos a reconstruir nuestra Guadalajara a partir de lo que escuchábamos en esos eventos”.

“Fue un proceso de reencontrarse con esa memoria sonora de esa Guadalajara de los años 90. Una Guadalajara muy salvaje, como la de hoy”.

Asimismo, el filme hace mención a algunos de los acontecimientos más emblemáticos de aquél entonces, como las explosiones del 22 de abril, El Tratado de Libre Comercio y el asesinato del Cardenal Posadas.

En ese sentido, Kishi declaró que el cortometraje es un homenaje no solo a su madre y a su tía, si no también a todos los locutores de radio de la época.

Un mundo por animar

En el panorama de la animación nacional, el tapatío indicó que no hay un estatus quo o un modelo a seguir, pues hay muchos artistas trabajando con diferentes estilos y técnicas; además, considera a Jalisco “la capital de la animación”.

Sobre el proceso de retratar sus vivencias personales en una obra fílmica, el director habló de la necesidad de desprenderse de esa relación interna con la historia que se quiere contar, para así poder darle un enfoque universal.

“Es como en el cuento de La isla desconocida de José Saramago, para conocer la isla primero tienes que salir de ella y verla desde afuera. Eso es el cine”.


Fotografías: Secretaría de Cultura Jalisco/Especial

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Adolfo Núñez
Colaborador de Ciudad Olinka. Especialista en temas cinematográficos. Ha trabajado para "La Jornada Zacatecas" y Radio UdeG Ocotlán.