Una de las subcuencas más azotadas por la voracidad inmobiliaria es la del Río Atemajac.
Las venas de este afluente nacen en la zona de San Juan de Ocotán, El Bajío y Valle Real en Zapopan, y que llegan a avenida Patria hasta desembocar en la Barranca de Huentitán.
En esta zona, investigadores del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD) instalaron la quinta estación meteorológica de la red de monitoreo que se encuentra en distintos puntos del Área Metropolitana de Guadalajara (AMG).
Con éstas se registran las mediciones del ciclo del agua en la ciudad, con el fin de conocer cuánta lluvia cae y así poder emprender mejores acciones de aprovechamiento del líquido.
Arturo Gleason Espíndola mencionó que dicha subcuenca podrá analizarse con la nueva estación que se instaló recientemente en un domicilio de la colonia Colinas de San Javier.
“Desde hace años, al querer hacer estudios hidrológicos de las cuencas en la ciudad (sobre cuánto llueve, cuánto escurre y se infiltra), la principal dificultad es la falta de información de las precipitaciones”.
“Esto es fundamental para el análisis y estudio del agua y, por supuesto, la proyectación de obras para manejar el agua”, detalló.
Amenazada por la urbanización
Recordó que “esta es una de las subcuencas más conflictivas por el ataque de la urbanización en áreas verdes y al arroyo Atemajac”.
Un caso emblemático es la inundación en Plaza Patria, derivado de la falta de infiltración del agua en lo alto de la cuenca.
Apuntó que la de Atemajac está a punto de ser urbanizada en 100 por ciento.
Y que al existir menos zonas de infiltración habrá menos agua para los habitantes que se abastecen de la misma.
A la par se generarán más inundaciones, como las ocurridas en Plaza Patria, por donde pasa el Río Atemajac.
Por ello, es importante conocer el diagnóstico del ciclo del agua en esta zona poniente del AMG.
En esta subcuenca emana agua del Bosque Los Colomos, proveniente de El Bajío (en las faldas de los cerros del Bosque de La Primavera).
Compartió que las estaciones deberán de hacer monitoreo durante diez años para tener datos certeros sobre cuánta agua cae en cada zona.
Con esto se podra´n tomar mejores decisiones sobre su gestión y aprovechamiento.
Esta red de estaciones meteorológicas mide variables como precipitación, magnitud e intensidad; temperatura, velocidad del viento y presión atmosférica.
Dichos datos se almacenan en un servidor.
La de Colinas de San Javier es la quinta a cargo del centro universitario; el resto se encuentra en varios puntos:
- CUAAD Huentitán
- Preparatoria 6, en el Cerro del Cuatro.
- Jardines de la Paz, cerca del Parque San Rafael.
- Camino Real a Colima, en Tlajomulco de Zúñiga.
A estas cinco, que son impulsadas por el Cuerpo Académico 604 “Gestión y Tecnología para la Arquitectura Sustentable” de la UdeG, se les suman los datos de cuatro estaciones más que están a cargo del Instituto de Investigaciones Tecnológicas de Agua, AC.