Mural de Poncitlán, hecho por Adry del Rocío, Carlos Alberto GH y Rubén Poncia


Una mujer y un niño materializan los recursos naturales que emanan de las aguas y la tierra del municipio de Poncitlán, Jalisco, y que sus habitantes han adoptado como parte de su identidad cultural.

Las hortalizas de chayote, los sembradíos de nopal, el pescado y las aves del Lago de Chapala, pero también el maíz, el trigo y el característico pan de picón del Valle de Poncitlán integran dos nuevos murales.

Sus autores son la artista Adry del Rocío, su hermano Carlos Alberto GH y Rubén Poncia, quienes plasmaron las pinturas en el ingreso a la cabecera municipal de Poncitlán.

“Están en un bajo puente, donde muchas personas esperan su autobús, con los murales quisimos dar vida a este espacio“, dijo Adry del Rocío en entrevista para Ciudad Olinka.

Explicó que se creó a petición del Municipio de Poncitlán y que está hecho con pintura acrílica para que pueda durar muchos años.

“Lo dividimos en dos: la Ribera de Chapala y la otra en el Centro de Poncitlán. Hablamos de la vegetación, de la flora y fauna de la Región Ciénega”.

Mural de Poncitlán, hecho por Adry del Rocío, Carlos Alberto GH y Rubén Poncia

“Tomo a la mujer como protagonista porque también es la madre, el origen, en todas mis obras siempre le doy un papel muy importante a las mujeres”.

“Y por otra parte está el trigo, el maíz, los chayotes. Ahí se muestra a un niño que es el presente pero la visión hacia el futuro, las nuevas generaciones de Poncitlán”, describió.

Como dato curioso, estos murales Adry del Rocío los comenzó justo después de terminar la cuarentena tras a dar a luz a su bebé, y que con ayuda de Carlos Alberto GH y Rubén Poncia los crearon en dos semanas; una semana para cada muro.

“Quisimos comunicar a los ciudadanos sobre su identidad para que sientan orgullo”, dijo la artista.

Arte para cambiar las dinámicas sociales

Dicho lugar es un parador de autobuses de rutas que viajan por la Región Ciénega, por lo que es un punto de movilidad importante.

En este entorno ahora se busca generar otra dinámica a partir de estas pinturas; pues a decir de Adry del Rocío, el arte puede incentivar un cambio social.

“Ya lo he visto, sí cambia el entorno, en Teuchitlán pintamos unos murales hace un año y el sólo hecho de pintar hizo que los vecinos se organizaron para limpiar el lugar”.

 

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“Ellos nunca se habían hablado y se organizaron”, externó sobre dicho mural que aborda la riqueza natural de la Presa de la Vega que está en aquel municipio.

“En una menor escala vimos cómo se generó el cambio; es el poderl del arte y las imágenes”.

“Para mí es mi objetivo como creadora: espero que logre un cambio en el día a día de las personas que ahí habitan y se apropien de la obra, que sientan empatía con ella, que les genere un cambio aunque sea un minuto en su vida”.

Sobre el nombre de las pinturas indicó que no les puso uno, así que espera que la gente lo haga. “Ese mural ya no me pertenece, es de la gente de ahí y ojalá le pongan el nombre que gusten”.

Este es el primer mural de Adry del Rocío en la Ciénega de Jalisco; ella ya cuenta con obra en la Casa de la Cultura de Ameca y las calles de Tuchitlán, en la Región Valles.

También creó un gran mural al ingreso del Hospital ISSSTE de Zapopan y ha pintado en 23 países. Uno de los murales lo pintó en Berlín, Alemania, y tiene una altura de 30 metros.

 

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Iván Serrano Jauregui
Reportero de Ciudad Olinka. Ha colaborado en Gaceta UdeG, Kä Volta, Revista Colibrí, El Diario NTR Guadalajara, Radio UNAM y Radio UdeG Ocotlán.