La noche del 4 de diciembre del 2020, más de 100 ciclistas se reunieron en el Parque Revolución, a las 18:30 horas, donde está el monumento de Venustiano Carranza.
En esa misma zona, en donde están los juegos infantiles, se obsequiaron ejemplares de la revista La Dosis.
Se asentó la noche y en ella centelleaba la luz de los postes, al ritmo de la danza de las nubes cannábicas. El humo se disipó y en la cuadra donde se encontraba la antigua Penal de Escobedo penetró el aroma a hierba.
Minutos antes de las 19:00 horas, la caravana sobre ruedas partió para transitar por avenida Vallarta, hasta a la Glorieta de Niños Héroes –proclamada por la sociedad como la Glorieta de los Desaparecidos– una vez tomada avenida Chapultepec.
El tiempo para reposar se prestó para que los asistentes encontraran aliento en las pipas, quemando unos gallos o tras darse tanques sabor a medicina.
Transcurrieron 10 minutos para cargar motor y seguir con el recorrido que se dirigió hacia el Centro de Guadalajara.
Mujeres y hombres compartían lo consideran su elixir de paz, mientras entre risas y música celebraban los pasos hacia la despenalización de la marihuana, aunque se está a la espera del dictamen final por parte del Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.
En la glorieta se hizo el regreso por el otro carril de Chapultepec, pero hacia el rumbo de la calle Libertad, para luego proseguir hasta la avenida Enrique Díaz de León.
Y aunque la mayoría de los transportes eran bicicletas o patinetas, había alguien con una conducción distinta: era una chica en silla de ruedas.
Los velocipedistas le alentaban a seguir, un lazo era la unión de una bici y ella, pero quedaron atrás después de que las camionetas de tránsito les impusieran presión para retirarse del recorrido.
Los agentes de Movilidad prefirieron dejar atrás aquel grupo que otorgarles una protección como partícipes del movimiento cannábico.
El ruido de las tuercas, la agitación de los ciclistas, la quemadera de mota y la convivencia se distinguía debido a la toma de carriles y el camino de la humareda.
En el alto de la esquina de Libertad y Enrique Díaz de León la gente documentaba la escena de la 12ª Rodada a Favor de la Tolerancia Hacia el Cannabis, impulsada por el Colectivo 4:20 Guadalajara.
La luz verde dio camino a doblar hacia la izquierda y continuar hasta la calle López Cotilla, que cuenta con una ciclovía.
Voces entonaban distintas melodías. Los ojos rojos eran la consigna de las miradas. Las marcas de las llantas punteaban el camino del triunfo. Llegando a Federalismo se giró hacia la izquierda y se rodó por la ciclovía.
Iban uno por uno, como fila india, debido a lo estrecho del carril. Al llegar a avenida Hidalgo dieron vuelta a la derecha, donde acapararon un carril completo de los tres que son.
Con el porro en lo alto circularon hasta el punto de llegada: La Plaza Liberación.
Al pasar por un costado del nuevo Mercado Corona, se aunaron las miradas de espectadores asombrados por el tumulto de jóvenes circulando y manifestándose por la libertad de que “la María” sea legal.
Aquella “María” que consumen para calmar ansiedades, estimularse de placer, relajarsey ayudar en el combate de enfermedades.
Ellos lo hacen por esa planta que produce CBD, THC y cáñamo.
Al cruzar Avenida Alcalde por un costado de la Catedral de Guadalajara y la Rotonda de los
Jaliscienses Ilustres arribaron a la explanada, muy cerca del Teatro Degollado. Un fuerte clamor de felicidad azotó el cuadro céntrico.
Los presentes conmemoraban el haber anclado sus llantas en aquel sitio que se ha impregnado de otras de situaciones de lucha.
Para solemnizar el momento, la mayoría de los presentes “se dieron un baiza” que significóvictoria. La fiesta culminó.
Los participantes de este evento, en medio de la pandemia, salieron volando hasta sus siguientes destinos.
Cuando la mayoría comenzó a retirarse, se observó cómo el grupo que escolta a la mujer en silla de ruedas cumplen el cometido de llegar a la meta.
Y así fue como varios pobladores de la ciudad de Guadalajara se manifiestaron por una “flor”, que –aseguran– no hace daño a nadie.