El Mariachi Nuevo Tecalitlán, agrupación con 55 años de historia, que ha visto pasar tres generaciones de músicos y visitado tres continentes, ofreció el concierto virtual Reencuentro, este 14 de agosto desde PALCCO.
Este grupo de talentosos, que ha acompañado a grandes intérpretes como Lola Beltrán, Miguel Aceves Mejía y Vicente Fernández, realizó el primer concierto de mariachi en vivo virtual en el mundo.
Después de tres meses de permanecer inactivos por la emergencia sanitaria, el mariachi más jalisciense se reunió para llevar a las familias del mundo la alegría que produce esta música.
Ángel Martínez Martínez, trompetista, representante y director general del Mariachi Nuevo Tecalitlán, nos compartió sus impresiones, en entrevista para Ciudad Olinka.
El Mariachi Nuevo Tecalitlán tiene una historia de más de medio siglo, cuyas generaciones también han aportado a la carrera de grandes de la música mexicanas.
Remontándonos en su historia, ¿cómo surge este proyecto y cuáles eran las miras de Mariachi Nuevo Tecalitlán?
Ángel Martínez (AM): La formación del mariachi fue hace 55 años y le tocó a mi tío Pepe Martínez y a mi papá, Fernando Martínez.
Estoy seguro de que fue por el amor a la música, pues ellos desde niños ya tocaban sus instrumentos.
Mi abuelo Blas fue músico de mariachi; él tocaba el arpa en el Mariachi Vargas de Tecalitlán, entonces ya traían herencia.
¿En estos años de historia, a cuáles artistas han acompañado?
AM: En nuestro libro Una historia digna de contar, que hicimos para el 50 aniversario del mariachi, recopilamos muchos de estos relatos. Imagínate. En 55 años qué no hemos hecho.
Hemos acompañado a grandes artistas: desde Lola Beltrán, Lucha Villa, Miguel Aceves Mejía, hasta contemporáneos como Alejandro Fernández, Natalia Lafourcade y Filippa Giordano.
También iniciamos la carrera de Vicente Fernández, porque cuando falleció Javier Solís, en la disquera necesitaban otro talento, entonces mi tío Pepe Martínez recomendó a Vicente Fernández, quien en aquel entonces era solista y trabajaba en la Plaza de los Mariachis.
Y bueno, la carrera de Vicente nace con el Nuevo Tecalitlán. También a la tercera generación del mariachi nos tocó acompañarlo en su despedida, “Un Azteca en el Azteca”, que fue una invitación que recibimos como reconocimiento y agradecimiento a la primera generación de nuestro mariachi.
¿Han musicalizado o participado en alguna película?
AM: Entre 2012 y 2013 participamos en una película extranjera llamada Los mariachis perdidos del Mariscal Tito, un documental para la televisora de Yugoslavia.
Colaboramos una semana con ellos y el punto era mostrarles cómo es el día a día de un mariachi. Fíjate que allá festejan los cumpleaños cantando las mañanitas mexicanas.
Por allá el mariachi es muy querido, la razón es que después de la Segunda Guerra Mundial, Europa estaba devastada y México era el único país libre de importar cultura a ese país.
La música mexicana si la pudieron importar, lo que ayudó mucho al pueblo de Yugoslavia a salir de la depresión que vivían.
Acá en México era la Época de Oro del Cine Mexicano, entonces los yugolavos conocen perfectamente a Jorge Negrete, Pedro Infante y muchas de las películas de la época.
¿Qué ritmos prefiere el Nuevo Tecalitlán?
AM: Nuestra especialidad es complacer a nuestro público, gracias al amplio repertorio que tenemos.
Los sones jaliscienses es un ritmo que disfrutamos muchísimo, son alegres, se nos enchina la piel.
Los huapangos es un ritmo que también nos encanta, pues se ha adaptado al mariachi bastante bien.
Háblame de la producción propia del mariachi y de las actividades que realizan
AM: En 55 años hemos hecho más de 90 discos. De los años 90 para acá entramos la segunda generación, pero empezamos a hacer producciones propias hasta el 2000 y hasta ahora llevamos 20 discos, uno por año.
Incursionamos en el 2004 en los conciertos con orquesta sinfónica. La primera vez que tocamos con orquesta fue en el Encuentro Internacional del Mariachi.
Rubén Fuentes nos prestó su obra Los Huapangos de Rubén Fuentes, porque nosotros no teníamos música orquestada.
También dentro de nuestras actividades, damos talleres en festivales para mariachis que vienen de diferentes partes del mundo y consisten en enseñarles el estilo, porque la mayoría ya saben tocar.
Pero nuestra labor es decirles cómo nosotros interpretamos la música mexicana. En Estados Unidos, varias universidades tienen su mariachi.
Hace 6 años iniciamos un proyecto con la Universidad Internacional de Texas A&M. iniciamos con 60 alumnos en un workshop y este año hubo más de 700 inscritos.
Esa experiencia de transmitir la música mexicana, de ser embajadores de nuestra identidad musical, es motivante, nos llena de satisfacción.
¿Qué se llevaron del concierto virtual?
Siempre nos hemos caracterizado por innovar en vestuario, estilo, y ahora nos toca en esta modalidad virtual.
En varias ocasiones se han grabado conciertos y se transmiten después, pero este concierto fue cien por ciento en vivo.
Quisimos que lo disfrutaran como si estuvieran en una sala de conciertos con nosotros.
Se llamó Reencuentro porque nos encontramos con un querido amigo, Steeven Sandoval, quien fue la voz de nuestro mariachi y con el Mariachi Femenil Nuevo Tecalitlán, pero sobretodo este reencuentro es con nuestro público.
“En estos tiempos donde faltan buenas noticias, queremos llevarles la alegría que produce esta bella música de mariachi.