Kauyumari, venado de Bolaños
Emblema. De dice que este animal sagrado mira hacia el Nierika, sitio donde se creó el universo, según la tradición wixárika. Fotografía: Iván Serrano Jauregui

Una vez que se baja una barranca profunda y se llega a Bolaños, los visitantes no sólo se encuentran con el oasis que crea el río que lleva el mismo nombre de esta población; también, los recibe el gran venado wixárika Kauyumari.

Se trata de una escultura de siete metros de altura (desde la base hasta la punta de la cornamenta), creada por varios artesanos bolañenses.

Esta obra forrada de gema o chaquirón custodia una de las puertas que lleva a la sierra wixárika y que remite a la sabiduría de este pueblo originario, de la Región Norte de Jalisco.

Kauyumari, venado de Bolaños
Detallado. Las gemas incrustadas forman patrones iconográficos de la cultura wixárika. Fotografía: Iván Serrano Jauregui

Los patrones iconográficos de las artesanías wixárikas envuelven a la representación de este venado, considerado como un animal sagrado.

Los colores rojo, amarillo, negro y blanco dotan de identidad a esta pieza, que está ubicada en un mirador que se encuentra a unos metros de la entrada de la cabecera municipal de Bolaños.

Desde este lugar se puede apreciar el Río Bolaños, el pueblo y los cañones. Se dice que la posición de Kauyumari está dirigida hacia el Niérika, sitio sagrado en la cima de la sierra donde fue creado el universo, según la tradición wixárika.

El diseño del venado fue hecha por el escultor Camilo Ramírez, quien aseguró que se utilizó una pasta espacial. Dijo que en él están representados temas religiosos como el ojo de dios wixárika.

Detrás de la creación del venado wixárika Kauyumari

Río Bolaños
Oasis. El Río Bolaños traza un espacio fértil en donde se estableció este poblado. Éste se puede admirar desde la estatua. Fotografía: Iván Serrano Jauregui

“Cuando uno está de cacería siempre corre hacia donde se va el sol y este venado se ve como si lo hubieraN correteado desde los cerros”.

“En esa rampa le vamos a hacer las huellas como que si por ahí hubiera subido y ahí se hubiera quedado”, compartió uno de los artesanos creadores, Óscar Hernández.

Este artesano, quien también era el presidente municipal de Bolaños cuando crearon la estatua, dijo en entrevista, para la revista Punto CUNorte, que la posición evoca el momento en que el venado es descubierto cuando los wixáritari salen de cacería.

Kauyumari, venado de Bolaños
Recreación. Una panorámica inigualable se puede apreciar desde el mirador de Bolaños. Fotografía: Iván Serrano Jauregui

Para la obra, Los artesanos recibieron 200 mil pesos, por parte de los gobiernos de Jalisco y Bolaños, y la Compañía Minera Arroyo del Agua.

La obra se develó el 25 de octubre de 2014.

Ahora, los visitantes y habitantes tienen un espacio a dónde acudir, para admirar las barrancas que rodean a Bolaños.

Pero el sitio también es ideal para visitar de noche, pues ahí se puede disfrutar del cielo estrellado del Norte de Jalisco.

Fotografías: Iván Serrano Jauregui

 

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